viernes, 10 de junio de 2016

Kamikaze

Muy buenas lectores, hoy vengo a contaros, como no, una de mis experiencias con Maxko y que, como veis en el título, os podéis esperar alguna locura.

Parece que Maxko y yo le hemos cogido el gusto a ésto de ser kamikazes, parece que con lo que llevamos a nuestra espalda no tenemos suficiente y también, parece que nos faltan un par de neuronas, tantas que por expandir nuestra creatividad olvidamos lo obvio.

Pero antes de continuar, vamos a por la definición de kamikaze, según la RAE, entre otros, es:

Persona que se juega la vida realizando una acción temeraria.

Para aclarar no es que Maxko y yo estuviésemos haciendo alguna locura en la que peligrase nuestra vida de forma inminente, pero a largo plazo quizás XD.

Teníamos la necesidad de comprarnos un microondas nuevo además de un carro de la compra y enseres varios, para aprovechar bien el viaje y poder llevarnos el microondas de forma cómoda, nos llevamos el carro "viejo", al cual le hemos dado muchísima tralla, hemos llevado en él, estanterías, mesillas y un montón de cosas más, que el pobre ya tiene el suelo deforme y la bolsa medio rota.

Total, al final compramos más de la cuenta y el microondas no nos cabía en ninguno de los dos carros, y nos quemamos la cabeza con la forma de llevarlo de forma apropiada, nos fuimos turnando, uno con el microondas y el otro con los dos carros que duramos poco la verdad.

Se me ocurrió la genial idea, sin ironía, de quitarle las cuerdas a mi saco y de esa forma quitando la bolsa, podríamos usar el esqueleto del carro viejo y atar la caja del micro para que estuviese sujeto, hay que decir que no somos marineros de agua dulce pero al menos los nudos soportaron el viaje.


Cuando llegamos al metro, echando la lengua fuera y a mí cayéndoseme los pantalones nos dimos cuenta de una cosa: el carro nuevo tenía cuatro ruedas por lo que mantiene una posición ideal para evitar que el microondas se cayera sin nudo alguno, (habría que poner por seguridad más que nada).

Estábamos tan obcecados en el problema que no nos dimos cuenta de tener la solución delante, en fin.

Y, diréis, ¿por qué no usasteis el coche o pagasteis un taxi?

1. No tenemos coche.
2. No estamos de acuerdo en pagar por un esfuerzo, que aunque nos cueste, podemos realizar.

De todas formas, como es la ñauierfuñgrn vez que nos tragamos, por propia voluntad, algo de esto, ya le dije a Maxko: "para qué queremos coche si esto nos es un deporte", entre nosotros estallaron las carcajadas pero es verdad, ya dicen que el trabajo duro es doblemente satisfactorio, pues ea XD.

Esto pasó el domingo, ¿pero sabéis que  hicimos el martes? Trajimos esto a casa:


Sí, un trasto más, un cabecero, que decidimos traer a pata por no pagar los gastos de envío, pero es que no estaba muy lejos la tienda de casa, aunque si os soy sincera, tenía miedo cada vez que veía a un niño porque pensaba, que en algún momento alguien se iba a tirar en plancha mientras lo llevábamos, menos mal que no nos encontramos a ningún amigo que seguro que nos hubiera hecho la broma jajaja.

También tuvimos que subirlo a pata a casa porque en el ascensor no cabía, inconvenientes de un edificio pequeño pero bueno, ahí está, plantado en el sitio que debe.

Bueno lectores, como siempre espero que os sirva de ejemplo, que es mejor ganarse el pan con nuestro sudor y no por comodidad, si te puedes ahorrar unas pelas, luego puedes usarlo en algo productivo o simplemente, tomarte algo con tus amigos, invitar a tu familia a comer, en fin, ejemplos muchos.

¡Hasta la siguiente!

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